Cevallos et al. (2025)
La relación entre ambos parámetros
permite deducir el índice de
plasticidad, un indicador clave para
evaluar la trabajabilidad y estabilidad
de los suelos.
minimizar los efectos de estos
cambios volumétricos.
Además, los valores más bajos,
como los registrados en las calicatas
3.1 y 5, indican suelos con menor
Los resultados del índice de
plasticidad evidencian una variación
notable, comprobando también que
la Calicata 15 destaca por su índice
excepcionalmente elevado, lo que
sugiere un suelo con alta capacidad
capacidad expansiva, lo que podría
ofrecer condiciones más favorables
para la construcción. Sin embargo,
los suelos con índices más altos,
como en las calicatas 10 y 16.1,
requieren un control exhaustivo de la
humedad y posibles tratamientos
para estabilizarlos, asegurando que
las variaciones de humedad no
de deformación, susceptible
a
cambios significativos en volumen
bajo variaciones de humedad. Este
valor denota una alta plasticidad,
común en arcillas expansivas que
comprometan
estructural.
la
integridad
pueden
generar
problemas
Los resultados del CBR, calculados
a partir de los valores obtenidos
mediante el ensayo de penetración
estructurales si no se manejan
adecuadamente.
En general, la mayoría de las
calicatas muestran índices de
plasticidad superiores al 20 %, lo
cual indica suelos con características
de plasticidad media a alta. Dichos
suelos tienden a ser más difíciles de
trabajar y presentan mayor riesgo de
expansión o contracción, lo que
podría influir negativamente en la
dinámica
(DCP)
y
fórmulas
empíricas establecidas, presentan
una amplia dispersión, con valores
que varían entre 1,38 % y 39,01 %.
Las calicatas 2 y 4 destacan por
registrar los valores más elevados,
39,01 % y 34,83 %, respectivamente,
lo que evidencia una mejor
capacidad portante en comparación
con las demás. Este comportamiento
puede atribuirse a factores como una
menor proporción de partículas finas
o una mayor compactación natural
del suelo, lo que favorece su
estabilidad
de
estructuras
construidas sobre ellos. La presencia
de estos índices elevados sugiere
que el diseño de las obras debe
incluir estrategias de mitigación para
551